Me gustaría pasar tiempo contigo.
Mucho tiempo contigo.
Tanto que tus perros se lanzaran a por mí
nada más verme.
¿Te gusta cómo me lanzo yo a por los versos?
Pisando el acelerador. Abriéndome paso
hasta que colisiono con alguna verdad.
Al fin y al cabo,
escribir es acordonar un crimen
e investigarlo.
Laura, aquí se pasa frío. Estoy solo.
La orilla de la playa no acepta mis huellas:
Salgo en mitad de la noche
y ofrezco mis apuntes:
mis frases robadas, modificadas,
imitadas o inventadas
y espero hasta que viene a buscarlas
alguna sombría alimaña
o algún gajo de luz del futuro.
Quiero pasar mucho tiempo contigo este verano.
¿Sabes por qué apenas como fruta?
Apenas como fruta
porque está cruda y hay que romperla.
Cuando muerdo una naranja
me siento como un caníbal,
el jugo que me chorrea por los labios
me hace pensar
en uno de esos leones que aparecen en los documentales;
les chorrea sangre de las fauces
mientras mastican
las entrañas de una cebra.
Pero, Laura, a veces sí como fruta:
cuando me siento tonto, sin imaginación:
cuando me noto
en blanco y negro
y no me salen los poemas.
Entonces como fruta para curarme:
me imagino que todas esas vitaminas
entran dentro de mí
y me revitalizan.
Es curioso que ahora que el mundo
me parece más colorido que nunca
desee tener contigo
profundos diálogos en blanco y negro.
Tus perros todavía se esconden al verme.
Las piscinas tiemblan, nerviosas,
a la espera de que los bañistas las rompan.
Mucho tiempo contigo.
Tanto que tus perros se lanzaran a por mí
nada más verme.
¿Te gusta cómo me lanzo yo a por los versos?
Pisando el acelerador. Abriéndome paso
hasta que colisiono con alguna verdad.
Al fin y al cabo,
escribir es acordonar un crimen
e investigarlo.
Laura, aquí se pasa frío. Estoy solo.
La orilla de la playa no acepta mis huellas:
Salgo en mitad de la noche
y ofrezco mis apuntes:
mis frases robadas, modificadas,
imitadas o inventadas
y espero hasta que viene a buscarlas
alguna sombría alimaña
o algún gajo de luz del futuro.
Quiero pasar mucho tiempo contigo este verano.
¿Sabes por qué apenas como fruta?
Apenas como fruta
porque está cruda y hay que romperla.
Cuando muerdo una naranja
me siento como un caníbal,
el jugo que me chorrea por los labios
me hace pensar
en uno de esos leones que aparecen en los documentales;
les chorrea sangre de las fauces
mientras mastican
las entrañas de una cebra.
Pero, Laura, a veces sí como fruta:
cuando me siento tonto, sin imaginación:
cuando me noto
en blanco y negro
y no me salen los poemas.
Entonces como fruta para curarme:
me imagino que todas esas vitaminas
entran dentro de mí
y me revitalizan.
Es curioso que ahora que el mundo
me parece más colorido que nunca
desee tener contigo
profundos diálogos en blanco y negro.
Tus perros todavía se esconden al verme.
Las piscinas tiemblan, nerviosas,
a la espera de que los bañistas las rompan.