Yo me reía con mi abuelo
incluso en los pabellones de la muerte.
Qué risa
en aquellas leproserías
de las salas de urgencias.
Recuerdo a un neurólogo muy joven
acercándose a mi abuelo
en el hospital universitario:
Señor Juan,
dígame nombres de animales.
Pues:
Un león.
Un tigre.
Una cabra.
Una zebra.
Una cabra.
No, señor Juan.
No repita animales.
No, doctor. Si no repito animales.
Esta cabra era otra.
incluso en los pabellones de la muerte.
Qué risa
en aquellas leproserías
de las salas de urgencias.
Recuerdo a un neurólogo muy joven
acercándose a mi abuelo
en el hospital universitario:
Señor Juan,
dígame nombres de animales.
Pues:
Un león.
Un tigre.
Una cabra.
Una zebra.
Una cabra.
No, señor Juan.
No repita animales.
No, doctor. Si no repito animales.
Esta cabra era otra.